Con el libro 13.99 euros, el francés Frederic Beigbeder ha pretendido hacer una parodia satírica sobre mundo de la publicidad, desde una perspectiva indisimuladamente autobiográfica. Para ello se saca de la manga a Octave, un exitoso redactor publicitario con notable capacidad verborreica para segregar eslogans, acostumbrado
Que Oscar Wilde fue un virtuoso del ingenio no lo puede negar ni el más irritado de sus detractores. Ni tan siquiera la más pomposa institución catedralicia de las letras universales. Malabarista de doble filos, esteta proselitista, y convencidamente genial, Wilde poseía
Cheese! Claro. Difícil contener el flash y la mandíbula intacta ante semejante espejismo arquitectónico. Repetida la foto, esta vez de perfil, asalta la inevitable duda ¿Estará aquí enterrado Akenaton III? ¿Alguna a secuencia aún inédita de reyes aztecas? No es para tanto,
Cuando Charlie Parker nació en mitad del mapa de Estados Unidos, allá en Kansas city, se gestó lo que luego sería la gran revolución del jazz: el estilo bebop. Corría el año 1920, pero aún a día de hoy, pocos le discutirían
“El humor es tolerante, enternecedor, su burla es suave, acariciante; El ingenio apuñala, pide perdón… y retuerce el alma dentro de la herida. El humor es un vino dulce; el ingenio, uno seco; bien sabemos cuál prefiere el autentico connoiseur…”. Así era
Mientras agonizo de William Faulkner es una de esas novelas a las que el protocolo literario obliga a tratar de usted, con el sombrero en la mano, y reverencia incluida a pié de página. Y no es para menos, porque nos encontramos
A nadie escapa que la vida del estudiante emancipado está plagada de padecimientos y limitaciones. Por eso, ante la (snif) melancólica ausencia del canal satélite paterno, y los nimios alicientes que proponen la pequeña y gran pantalla, se suele ver fatalmente empujado
El Pecho de Philip Roth nace siguiendo una estela literaria de primer orden. En efecto, resulta evidente el guiño reverencial que Roth realiza a monumentos literarios como La Metamorfosis de Kafka, y La Nariz de Gogol Todas ellas son historias ilógicas