SCOTT MATTHEW: DULCE CANTO A LA TRISTEZA

En el Teatro Lara de Madrid aun se escuchan suaves ecos de la voz de Scott Matthew, que sembró la sala el pasado martes de un hiperdelicado folk acústico. A los que estuvimos allí aun nos ronda la cabeza la particular estampa

GIGOLÁ, DE LAURE CHARPENTIER

Cerremos los ojos un momento para volver a abrirlos en el parisino barrio de Pigalle. Un velo de luces rojas tiñe la noche y anuncia el vicio de sus profundidades: alcohol caro y romanticismo barato. Las aspas del Moulin Rouge se alzan

PETE DOHERTY. ENTRE EL JOLGORIO Y LA VERGÜENZA

Drogadicto, intelectual, barriobajero, pero también talentoso. Pete Doherty es un artista dotado de indudable talento escondido bajo numerosos pecados capitales. Un músico desfigurado por algún trauma, la droga y modelos bellas. Fracasa constantemente en su rehabilitación, pero la música se le da

EL TIEMPO AMARILLO

Del mecanógrafo al tatuador, del barquillero al vendedor top manta. Los mejores fotógrafos del país nos invitan a hacer memoria a través de un valioso retrato que parte de la España lejana de principios del siglo XX hasta la más presente.

PHOTOESPAÑA 2011

Madrid es esa estresante capital de un país que nunca dejará de ser paleto. Un paisaje encantador poblado por grúas y por 6 millones de habitantes que vociferan. La podría vender así y no mentiría. Pero tampoco mentiría si digo que

JOAN AS POLICE WOMAN

Mientras muchos se sumían en la tristeza de los actos de homenaje a las víctimas del 11-M; mientras la isla de Japón era sacudida por una ola de película furiosa y extraordinaria, algunos teníamos la enorme suerte de estar metidos en la

LAS AVERÍAS DE LA VIDA

La avería. Una comedia, un thriller, un drama. Un baile constante entre mundo real y pesadilla. Un cuento trágico y una historia gótica rebosante de profundidad. Llamémoslo esperpento. Es este el último proyecto de Blanca Portillo, actriz que ya se lanzó a

CAT POWER, BÁLSAMO PARA LAS HERIDAS

Algo me ocurre cuando le doy al play y suena esa voz delatadora de una mujer con un pie en el cielo y otro en el infierno. Y es que escucharla es desolador, pero no puedo parar ni quiero. Es como