Música CUANDO UN DIRECTO VALE MÁS QUE MIL DISCOS: NUDOZURDO Y LA DÉBIL Creo que de las mejores sensaciones que se puede llevar uno a casa tras haber asistido a un concierto, es irse con el cosquilleo en el estómago pensando que has vivido algo mágico, grande... algo diferente en el concurrido foso. La despedida 15 junio, 2011