Los lugares son fundamentales para mí. Descubrirlos, conocerlos y mimetizarme con ellos son las razones que me llevan a viajar y que me inspiran a la hora de escribir.
En pleno corazón de Malasaña, cerca de la calle Pez y la calle Ballesta, se encuentra una pequeña callejuela, de tintes castizos. Es la calle Nao, una calle estrecha, conocida en el entorno por estar siempre llena de vecinos paseando a sus