El pasado veintitrés de junio, la banda estadounidense de rock Imagine Dragons lanzó, bajo el sello de Interscope Records, Evolve, un nuevo disco que retoma los sonidos del primer álbum.
El grupo, compuesto por Dan Reynolds (voz), Wayne Sermon (guitarra), Ben McKee (bajo) y Daniel Platzman (batería), se formó en 2008 en Las Vegas (Nevada, Estados Unidos), aunque no fue hasta el 2012 cuando alcanzó la fama mundial con It’s time y Radioactive, dos singles de su primer álbum Night Visions (2012). Medios como MTV o la revista Rolling los calificaron, en 2013, como “la banda revelación del año”.
Muse, Depeche Mode, Arcade Fire e, incluso The Beatles han influido de alguna forma en esta banda que mezcla pop y rock alternativo. Imagine Dragons se centra en la percusión y en la fuerza de la voz para crear melodías rítmicas. “Nos gusta hacer sonidos crudos y naturales, y transformarlos en sintéticos sin que pierdan su naturalidad y su crudeza” explica el guitarrista Wayne Sermon.
En Bleeding Out, It’s Time o On Top of the World la fuerza instrumental se convierte en protagonista. El tono alegre de estos dos últimos singles del primer álbum contrasta con la oscuridad que trasmite Radioactive, un tema donde la percusión libra una batalla con la potencia vocal de Reynolds.
Hear me, por su parte, mezcla el positivismo que transmite It’s Time con la dureza de Radioactive, creando una canción llamativa gracias a ese contraste.
En Demons la percusión enfatiza determinadas partes del single, haciendo que el tema tenga mucha más potencia y la letra cale más profundo. Aunque sigue la estela dejada por Radioactive, Demons aprovecha la música para hacer una crítica a la sociedad actual y proclamar que la esperanza nunca debe perderse.
En 2015 publicaron Smoke + Mirror, su segundo álbum. Este disco, aunque tiene canciones muy potentes, no consigue ponerse a la altura de su antecesor.
El rock se respira en I’m So Sorry gracias a la batería y las guitarras que marcan el ritmo y a la voz de Reynolds, la cual se abre paso con fluidez.
Los extraños sonidos que han añadido en Gold le dan un aire psicodélico al single, mientras que Smoke + Mirrows, el tema que da nombre al álbum, resulta ser un conjunto de ritmos que no terminan de encajar en la canción.
Dream destaca por la sutileza del piano. La voz rasgada del cantante elevan la canción y la convierten en una pieza emotiva capaz de remover corazones.
Ahora el grupo ha presentado Evolve, su tercer álbum. Aunque musicalmente no se diferencia demasiado de su primer trabajo, en este último disco han mimado cada tema para retratar las emociones usando el mínimo posible de instrumentos.
El sello distintivo de Evolve es que sus melodías son mucho más personales. I’ll Make It Up To You y Start Over son un claro ejemplo de ello. «Quiero que la gente oiga Evolve y lo ame y lo odie. Quiero que el mundo sea un lugar apasionado. Esperemos que también sea compasivo, pero yo sólo puedo controlar mis palabras y sentimientos, no los de otros. Espero que escuches a este disco y lo sientas. Espero que escuches mi voz y entiendas que cada palabra es honesta», expresó el cantante en su cuenta de Twitter un día antes del lanzamiento del álbum.
La canción Rise Up juega con los cambios de ritmo y los empasta de forma fluida, convirtiendo el tema en una melodía pegadiza y llamativa. Por otro lado, la parte más romántica del disco recae en Walking the Wire.
Yesterday, Mouth of the River o Dancing in the Dark reflejan, también, la espiritualidad que caracteriza el nuevo trabajo de la banda. No obstante, las piezas más fuertes son Believer y Thunder. En Beliver exploran los ritmos más duros, como ya hicieron en Radioactive, pero sin llegar a sacar el lado más rockero que mostraron en I’m So Sorry. Mientras que en Thunder demuestran su capacidad para coger distintos sonidos e influencias y unificarlos en un sencillo adictivo.
Evolve recuerda mucho al Imagine Dragons de Night Vision, ya que siguen jugando con la percusión, los ritmos electrónicos y las letras adictivas. Sin embargo, han sabido recoger lo mejor y darle una vuelta para presentar un trabajo mucho más maduro y personal que, aunque suena parecido, no llega a ser igual. Es por eso que este álbum se posiciona como digno sucesor del disco que les dio la fama.
«Prometo entregarles todo mi corazón cada noche mientras interpretemos este disco (…). No buscaré más aprobación que la mía propia. Cantaré hasta el día en que muera. Seguiré amando ferozmente y cantando apasionadamente. Nadie me puede quitar eso» comentó Reynolds en Twitter.
La banda ha lanzando, desde su éxito en 2012, una serie de singles para otros proyectos. Battle Cry formó parte de la película Transformers: La era de la extinción (2014). Not Today se incluyó en la banda sonora de Yo antes de ti (2016), y Leviatate se grabó para el largometraje Passengers (2016). El single Warriors, por su parte, pertenece a las bandas sonoras de Insurgente (2015), Wonder Woman (2017) y del videojuego en línea League of Legends (2014).
En definitiva, Imagine Dragons ha demostrado que el reconocimiento que recibieron, en su momento, es más que merecido y que, aunque Smoke + Mirrow no sea su mejor disco, han seguido trabajando y buscando una mejor versión de ellos mismos.
