Palabras como ‘poliamor’ o ‘cubrebocas’ ya forman parte de la RAE

Diccionario de Lengua Española
Diccionario de Lengua Española Foto: RAE

El jueves 16 de diciembre, la Real Academia Española (RAE) presentó, en su actualización 23.5 del Diccionario de la Lengua Española (DEL), más de 3 mil modificaciones en su última entrega. Esta actualización se realiza en coordinación con la Asociación de Academias de la Lengua Española (ASALE), –formada por 22 academias asociadas en su trabajo al servicio de la unidad del español–, con la que se acuñan los términos que son utilizados por las personas hispanohablantes.

Siendo el español una lengua hablada por más de 400 millones de personas, el DLE debe incorporar las palabras coloquiales y los términos usados en las distintas regiones de Hispanoamérica para así llevar el uso correcto de nuestro idioma a un ratio de personas más amplio.

Una pregunta que mucha gente se plantea cada vez que se publican estas reformas, es “¿por qué se admiten unas palabras y otras no?”. La realidad es que la RAE no se encarga de “admitir” palabras, sino de incluir, incorporar o registrar esas expresiones utilizadas por una mediana generalidad de personas.

De esta manera, en este último reajuste, se han considerado tanto la adición de nuevos términos, como correcciones y nuevas acepciones que ya figuraban en el Diccionario. Todas ellas ya se encuentran disponibles en su página web.

Otra de las sorpresas la anunciaba María Betulia Pedraza, doctora en filología y docente de la Universidad del Norte. Explicaba que “el diccionario de ahora en adelante será digital, no volverá a presentarse una edición en papel. En ese sentido no solo se hacen actualizaciones sino también enmiendas.”

Tecnología

La nueva era tecnológica que acecha a la sociedad ha hecho que se acuñen nuevos términos en el área de esta rama. Ya forman parte de nuestro vocabulario palabras como “bitcóin” o “ciberacoso”. Además, se han incluido nuevas acepciones en este ámbito, como por ejemplo, «audio» como mensaje sonoro que se envía digitalmente, o «compartir» para referirse al acto de poner a disposición de un usuario un archivo, enlace o cualquier contenido digital.

Pandemia

Como era de esperar, la pandemia también ha cambiado nuestro vocabulario. La irrupción del coronavirus no solo nos ha afectado en temas de salud, sino que ha logrado infectar otros aspectos de nuestro día a día, en especial nuestra lengua. El propio término “COVID” y otras palabras como “cubrebocas”, “cribado” o “nueva normalidad” han sido recogidas por el DLE.

Diversidad sexual

Atrás no han quedado términos de naturaleza sexual que han calado desde hace unos años y se han incorporado a nuestro imaginario colectivo de una manera natural y sin juzgamiento. Entre ellas se encuentran “poliamor”, “transgénero”, “cisgénero” o “pansexual”.

Se conocía también hace unas semanas, que la RAE se ha involucrado con Microsoft en la inteligencia artificial para expandir el buen uso de la lengua española. Con este hecho demostraron que no son únicamente una institución solemne integrada por un grupo de lingüistas veteranos y literatos.

Director de la RAE
Sergio Machado, director de la RAE. Foto: RAE

Hace dos años, el director de la RAE, Santiago Machado, anunciaba un nuevo reto: “enseñar español a las máquinas para evitar que la tecnología degrade la lengua de Cervantes”. Y así nació el proyecto LEIA (Lengua Española e Inteligencia Artificial).

“LEIA se ha ideado con el objetivo principal de que las máquinas, y todas las herramientas digitales, utilicen un correcto español. A partir del siglo XVII, la RAE consiguió que sus normas se siguieran, se armonizaran y generalizaran con los mismos usos ortográficos, gramaticales y léxicos de nuestra lengua”, aseguraba Muñoz Machado.

La evolución del mundo y la evolución de la lengua hace que el entorno tenga que adaptarse a los cambios que llegan. Las tecnologías son uno de ellos, por lo tanto hay que buscar la forma de no degradar ni perder el sentido de nuestras palabras.

Andrea Girona

Licenciada en Periodismo en la Universidad de Murcia.

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