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Beatriz Medina, «‘Los héroes del mal’ es una película realista»

Beatriz Medina en Los héroes del mal / Fuente: www.facebook.com/LosHeroesDelMal
Beatriz Medina en Los héroes del mal / Fuente: www.facebook.com/LosHeroesDelMal

Desde el viernes 17, y hasta el próximo domingo 26, la ciudad de Málaga se llena de directores, actores, productores y aficionados del séptimo arte. Un año más, el Festival de Málaga, que cumple su mayoría de edad, pretende favorecer la difusión y promoción de la cinematografía española. Entre los largometrajes que se proyectarán en la Sección Oficial, candidatos para alzarse con la prestigiosa Biznaga de Oro a mejor película, se encuentra la opera prima de Zoe Berriatúa, Los héroes del mal, un film producido por Álex de la Iglesia y protagonizado por los jovencísimos Jorge Clemente, Beatriz Medina y Emilio Palacios.

Dos días antes de su viaje a Málaga, la actriz Beatriz Medina se reúne con Cultura Joven para hablarnos de la película, donde interpreta al personaje de Sarita: «Los protagonistas de Los héroes del mal son tres adolescentes inadaptados, cada uno por un motivo diferente, que son víctimas de bullying. Mi personaje, por ejemplo, odia el mundo. No entiende a la gente de su edad y no le interesan los temas de conversación de las chicas de su clase. Los tres tienen muchos problemas familiares en casa y, en pleno cambio de la niñez a la adolescencia, empiezan a utilizar la violencia para vengarse de todos los que les han jodido».

Cultura Joven: ¿Es una película pesimista?
BM: Es una peli muy dura de ver. Como dice Zoe (director de la cinta), no hay ningún tipo de concesión. Siempre estás esperando que pase algo bueno, pero no va a pasar… Yo la llamaría realista, más que pesimista. Es verdad que hay momentos muy bonitos y alegres, pero el contexto general de la película es duro y bastante crudo.

Jorge Clemente, Emilio Palacios y Beatriz Medina en Los héroes del mal.
Jorge Clemente, Emilio Palacios y Beatriz Medina en Los héroes del mal / Fuente: www.facebook.com/LosHeroesDelMal

Beatriz tiene veintidós años, nació en Badajoz pero con tan solo un año de vida se trasladó con su familia a Málaga, donde pasó la mayor parte de su infancia.  A los trece se mudó a Madrid, y a los quince se matriculó en una escuela de actores. Casi diez años después de su llegada a la capital, Beatriz regresa a la ciudad que la vio crecer para presentar el primer largometraje en el que participa como actriz.

CJ: ¿Qué supone para Beatriz Medina estrenar Los héroes del mal en Málaga?
BM: Cuando yo vivía allí, me invitaban al festival porque el tío de una amiga trabajaba ahí. Yo siempre pensaba que me encantaría estar en el festival algún día, trabajando como actriz. La película se presentó a Berlín y a Sundance también, pero a mí, realmente, lo que más ilusión me hacía era que nos seleccionasen en Málaga. Y estar allí con mi familia. Si fuese en otro sitio, ellos no podrían ir. Pero estando allí, puedo estar con todos.

«Los personajes se utilizan unos a otros para salir del mundo oscuro que tienen alrededor»

CJ: ¿Qué es lo que más le ha costado a la hora de preparar el personaje?
BM: Sarita es una chica muy sensible, pero que vive con una coraza de “soy una tía dura y conmigo no puede nadie”. Cuando me leí el guión, me parecía difícil mostrar toda esa sensibilidad, toda la ternura que realmente tiene. Ella está todo el rato con una actitud de pelea, por lo que pensé: “¡¿cómo narices muestro yo toda esa otra parte que también es ella?!”. Eso fue lo que más me costó, hilar sin que fuera obvio. Al final, creo que ha quedado un buen trabajo y que se intuye bastante.

CJ: ¿Qué aporta a los personajes el uso de esa violencia extrema?
CJ: Para ellos, la violencia es una manera de sentirse válidos. Después de todo ese tiempo en el que se han sentido como una mierda, inferiores a todo el mundo que les rodeaba, encuentran una manera de hacerse respetar. Sarita es la que más utiliza la cabeza, la que dice: “vale sí, usemos el mal. Pero el mal contra los malos, no contra todo el mundo”.

CJ: ¿Qué vínculo se establece entre los tres?
BM: Los primeros que se conocen son Esteban (Emilio Palacios) y Aritz (Jorge Clemente). Enseguida conocen a Sarita y se crea una amistad entre los tres. Descubren una casa abandonada que les encanta. Empiezan a decorarla y, prácticamente, viven ahí. Llega un momento en el que descubren el sexo los tres juntos. Entonces, empieza a haber problemas. Aritz se empieza a ir por un lado, Sarita y Esteban por otro… Acaban distanciándose. Hasta que Aritz se mete en un buen lío y, sin quererlo, involucra también a Esteban y Sarita. Para mí lo más bonito de la peli es esa relación que se crea entre ellos, cómo se utilizan los unos a los otros de vía de escape para salir de todo ese mundo oscuro que tienen alrededor.

CJ: ¿Cómo ha sido trabajar con sus compañeros?
BM: Ha sido genial. A Emilio ya le conocía de antes porque compartíamos representante. De hecho, hicimos la prueba juntos. Jorge fue toda una sorpresa. Era un trabajo en el que teníamos que estar los tres muy unidos. Emilio y yo teníamos un poco de miedo por si llegaba alguien con el que no conectásemos, con el que no hubiese feeling… Pero no fue así, sino todo lo contrario. Quedábamos para ensayar nosotros por nuestra cuenta mogollón de veces. Fue genial. Con Zoe, el director, igual. Todo el equipo, fue una piña. Empezamos a rodar la película sin saber qué iba a pasar. Sin saber si íbamos a terminar o no. Entonces, fue un trabajo súper bonito. Estábamos todos a una. Y si el técnico de luces me tiene que vestir, me viste. Y si yo tengo que descargar material, pues descargo material. No había un rol establecido de cada uno.

CJ: La producción de Álex de la Iglesia, ¿entró una vez iniciado el proyecto?
BM: Sí. Como digo, nosotros empezamos a rodar sin nada. Llegado un momento, Zoe le mostró a Álex un pequeño teaser que montó con las imágenes que había rodado hasta entonces. A él le gustó bastante. Entonces, Carolina Bang y él, con su productora, decidieron apostar por la película y echarnos una mano.

«Los héroes están dentro de cada uno»

CJ: ¿A quién cree que va a gustar más Los héroes del mal? ¿A los adolescentes de dieciséis años que tienen la misma edad que los personajes, o a sus padres?
BM: Hombre, yo creo que a los padres que tengan niños de dieciséis años no les va a gustar (ríe). Porque no querrían ver a sus hijos en eso, básicamente. Yo creo que la película está enfocada a un público más adulto. O a adolescentes que les guste mucho el cine.

CJ: ¿Cómo ve el cine español? ¿Qué directores o actores le gustan?
BM: Un director que me gusta mucho es Vicente Villanueva. Todos los cortos que ha hecho me encantan. De actrices, Candela Peña. El cine español me gusta mucho, pero creo que hace falta apostar por cine más indie, más independiente. Hay buenísimos directores y buenísimos actores que no tienen un nombre y que no se les conoce. Hay muchos actores buenos en teatro que podrían trabajar perfectamente en cine. Yo creo que hace falta apostar por otro tipo de cine: por producciones más pequeñas que realmente tengan un contenido, que te toquen de alguna manera.

CJ: Hoy, ¿dónde cree que están los héroes?
BM: Están dentro de cada uno. Lo que pasa es que hay que apostar más por el héroe que llevamos encima. Es complicado, porque la sociedad no creo que te deje demasiado. Pero, en cualquiera de nosotros puede estar.

Beatriz Medina caracterizada para la función El Pirata Malapata / Fuente: www.facebook.com/vaiven.teatro
Beatriz Medina caracterizada para la función El Pirata Malapata / Fuente: www.facebook.com/vaiven.teatro

 

BEATRIZ EN EL TEATRO

Desde el pasado mes de diciembre, Beatriz Medina se encuentra en el reparto del espectáculo infantil El Pirata Malapata en busca del tesoro, una producción de Vaivén Teatro. La obra se representará de nuevo durante el próximo mes de mayo en la sala alternativa Artespacio Plot Point. «El teatro infantil es algo que no me gustaría dejar de hacer», dice la actriz. «Me gustaría poder seguir compaginándolo con cualquier otra cosa, me parece súper bonita la magia que se crea en un teatro lleno niños».

Víctor Barahona

Diplomado en arte dramático, licenciado en comunicación audiovisual, máster en periodismo cultural... o un loco soñador.

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