Hablamos con el cantautor sobre su larga carrera musical y su experiencia en confinamiento.
Han pasado casi 20 años desde que Alex Ubago (Vitoria-Gasteiz, 1981) emocionara al país entero y parte del extranjero al cantarle el primer “Me muero por conocerte” a una jovencísima Amaia Montero. Pero da igual: Sin miedo a nada (2001), sigue poniendo los pelos de punta a todo aquel que la escucha, ya sea en vivo, delante de un enorme escenario junto a otros tantos miles de personas, o en una inusual videoconferencia con el cantautor en plena pandemia mundial.
La balada es la banda sonora de su vida y tiene claro que nunca va a dejar de crear una nueva. Pero después de tan larga trayectoria, Ubago ha decidido apostar, en su música más reciente, por ritmos alegres, latinos incluso. “Después de siete discos, siento la necesidad de reinventarme, pero nunca voy a perder mi esencia. Trato de hacer balance entre cosas nuevas y diferentes y otras más clásicas”, explica el cantante cuando le preguntan por su nueva colaboración con Mike Bahía, Si tú te vas, su tema más urbano hasta el momento.
La trayectoria del cantautor vasco ha sido larga y constante. “He trabajado siempre con el mismo equipo y por eso me he sentido cómodo, tranquilo y libre con cada decisión”, cuenta el músico. En tantos años, los altibajos terminan siendo inevitables, por eso el artista confiesa haber sufrido una “crisis creativa” después del lanzamiento de su segundo álbum, Fantasía o realidad (2004), cuando ya llevaba demasiado tiempo sin darse un respiro. “Pasó, como todo, y a día de hoy no tengo miedo a que vuelva a suceder”, asegura.
Se encuentra en el que considera su mejor momento musical: “estoy más seguro en el escenario, soy más creativo en la composición y disfruto como nunca”, admite. Además, aunque tuvo que “aplazar unos cuantos conciertos”, pasar tantas semanas encerrado en casa le ha servido para hacer brillar su faceta creativa y multiplicar su actividad en redes sociales. Ya tiene pensados unos cuantos nuevos títulos que espera poder publicar pronto, como una canción junto a Jorge Marazu (Ávila, 1986) que narra la historia de dos personas que se acaban de conocer justo antes de tener que aislarse en cuarentena.
A principios de siglo, mucho antes de que el éxito aterrizara en su vida, a Alex Ubago le parecía inalcanzable “el solo hecho de poder vivir de cantar y escribir canciones”. “¡Imagínense todo lo que ha venido después!”, exclama antes de mencionar a Disney, The Corrs, Alejandro Sanz o Joaquín Sabina, entre otros. Para el cantautor, “no existe profesión que regale cosas más bonitas que la música”.
