La 62ª edición del Festival de Eurovisión viene muy fuerte. Este año hay gran variedad de canciones, desde un buen puñado de baladas hasta temas de lo más actuales y comerciales, sin olvidar a algunos países que han dejado de lado el inglés para defender su propio idioma.
El festival, que en un inicio nació como un certamen musical, con el paso de los años se ha ido convirtiendo en el mayor acontecimiento del mundo. Según pasa el tiempo, los artistas se basan tanto en la parte musical como audiovisual. Y es que, sin una buena puesta en escena no tienes mucho que hacer.
A lo largo de los años, muchas son las propuestas de calidad que ha habido en el festival. Sin embargo, varias actuaciones que, a priori, iban a ser espectaculares terminaron siendo verdaderos esperpentos. Allá van algunas de ellas:
Eva Santamaría – Hombres (España, 1993)
Empezamos fuerte. A España nunca le ha ido demasiado bien en Eurovisión. Algunos se escudan en el vecinismo o en el «nunca ganaremos porque es todo política», pero no. Aunque Eva Santamaría sea una gran artista, actuaciones como esta nunca traen nada bueno.
Verka Serduchka – Dancing Lasha Tumbai (Ucrania, 2007)
Una maravilla de principio a fin. Verka Serduchka es un actor, cantante y comediante ucraniano que, sin ningún tipo de vergüenza, se atrevió a cantar este tema en el que, según muchos, le manda un mensaje sutil a su archienemiga Rusia…
Scooch – Flying the Flag (Reino Unido 2007)
Nadie se explica cómo Reino Unido, con la industria musical que tiene, pueda elegir tan poco competitivos para que le represente en Eurovisión. La puesta en escena de Scooch se adecúa perfectamente al tono de la canción, pero no resultó nada efectiva en un festival como Eurovisión.
Valentina Monetta – The Social Network Song (San Marino, 2012)
Probablemente San Marino sea uno de los países más peculiares de los que participan en Eurovisión. Nunca deja indiferente. En 2012 Valentina Monetta tuvo que cambiar la letra de su canción porque mencionaba a Facebook (¡en el festival está prohibido mencionar marcas!). Y su actuación fue todo un lujazo.
Donatan & Cleo – My Slowianie (Polonia, 2014)
En 2014 Polonia llegó a Eurovisión con una puesta en escena sugerente, ordinaria y vulgar. Aun así, consiguieron superar la semifinal y pisaron la final del festival.
Homens da luta – Luta è Alegria (Portugal, 2011)
Homens da luta es un grupo portugués que surgió a raíz de un programa de televisión. Su canción, Luta è alegria, se inspira en la tradición del canto colectivo que tan de moda estuvo en Portugal en la década de los setenta. Aunque la idea es buena, la actuación termina resultando demasiado recargada y poco seria.
Ping Pong – Sameyakj (Israel, 2000)
El final del siglo XX fue devastador. Israel llegó a Eurovisión en el año 2000 con una puesta de escena que ya estaba pasada de moda incluso en ese momento.
Jemini – Cry Baby (Reino Unido, 2003)
Reino Unido vuelve a entrar en el Olimpo de los dioses. Y es que su actuación del 2003 es digna de una película para adolescentes.
Dustin the Turkey – Irlande Douze Pointe (Irlanda, 2008)
Una imagen vale más que mil palabras:
Cezar – It´s My Life (Rumanía, 2003)
Un rumano que se caracteriza de Drácula es toda una oda a la coherencia. Vocalmente es una buena actuación, pero peca cayendo en lo obvio y su estilismo termina despistando al espectador.
