Dicen que son las mejores maquetas del 2010 y la revista Mondosonoro les ha juntado para que toquen juntos pero no revueltos y así, los madrileños, podamos disfrutar de su sonido en la sala Heineken de Madrid dentro del programa en nuestro país de las Fiestas Demoscópicas. Burgos, Valencia o Barcelona ya han podido disfrutar también de esta fiesta, pero para los que anden un poco perdidos, tranquilos, que sepan que todavía quedan las de Gasteiz (24 de febrero), Santander y Bilbao (25 de febrero) y Las Palmas de Gran Canaria (19 de marzo).
Son tres más uno, el artista invitado, y tras una primera escucha a sus demos, lo primero que me planteo es el orden en el que tocarán estos tres grupos que entre ellos y hablando en plata ‘se parecen como un huevo a una castaña’. Marcus Doo And The Secret Family cantan en inglés y destilan profundidad, sutileza y cierta ñoñeria, Fira Fem son un grupo de música experimental, instrumental y con corrientes electrónicas y Los Claveles tienden al punk español de los 80. Porque el orden de los factores sí altera el producto, y en este caso, te puede dejar mejor o peor sabor de boca, mayor o menor adrenalina en vena y con más o menos ganas de seguir disfrutando de la noche madrileña.
Eran las ocho y media cuando llegué y las puertas de la sala ni siquiera estaban abiertas, pese a todo, la gente ya se agolpaba en la pared de la calle Princesa invitación en mano, por eso cuando entré, un rato después, me extrañó ver que la sala estaba más vacía que llena, y eso a priori enfría el ambiente, y las ganas, porque ya se sabe que los conciertos en salas grandes y poca gente pierden en calidad, en intimismo, los huecos vacíos hacen que el sonido se expanda y pierda sentimiento.
Eran 21.30 cuando la fiesta Demoscópica de la capital dio el pistoletazo de salida y fueron los Fira Fem los encargados de abrir la noche. Su sonido sonó limpio y bailable, su electrónica cuidada y sus ritmos sintéticos bien hechos, que en ocasiones, puede recordar a Caribou. Así da gusto. La textura de sus temas hizo, que los vacíos de la sala fueran menos vacíos y más llenos de musicalidad densa y de calidad. Nos dejaron claro que no tienen nada que envidiar a cualquier grupo en la cresta de la música experimental y del folk psicodélico. Fira Fem son 4 y consiguieron llenar el escenario y la sala en la media hora que estuvieron deleitándonos con su buen hacer y que remataron, cuando Óscar al teclado, se hizo con el micrófono para cantar su tema ‘Old man jacket’, el más conocido y que da nombre a su nuevo EP. Sin duda el mejor. Y es que, aunque repita en cada una de sus entrevistas que no se va a animar a ‘ser la voz cantante’ del grupo, este chico tiene una voz que atrapa y hace que sus temas suenen más profundos si cabe. Aunque eso, es una mera opinión, ya que, según me confesaron una vez terminado el concierto, lo de introducir voz a sus temas, es algo que aún esta en el aire.
Los segundos en salir al escenario, ya con la sala más llena, fueron Los Claveles. Grupo al que esperaba con especial entusiasmo, y es que, tras haber escuchado los temas que componen su maqueta, me vino a la cabeza su parecido con el grupo Agua Bendita, también catalanes. Y ya se sabe que jugar con los recuerdos es, en principio, una batalla ganada y más si estos son de quinceañera punky. Sin embargo, el mismo grado de entusiasmo se convirtió en decepción. Aunque sus letras son ácidas y divertidas, de esas que te sacaban media sonrisa por su tono directo y algo vulgar, sonaban menos punkys. Mucho menos, dónde va a parar. Menos rápidos. Más poperos. Más de lo mismo. Nada nuevo. Y al final su concierto, pasó, al menos por mi noche, sin pena ni gloria.
Finalmente, en cuanto a maquetas se refiere, llegaron Marcus Doo con su familia numerosa y multicultural. Al contrario que con Los Claveles, esta claro que estos chicos ganan en directo. Son más profundos, pero con una evidente inyección de intensidad y sin sobredosis de fragilidad. Consiguen trasmitir y nos demostraron cómo hacer un gran concierto con sutileza y elegancia. Además, la voz de Rocío en directo gana en dulzura pero también en contundencia. Los co-ganadores del proyecto demo en el 2010 fueron de lo mejor de la noche.
Como colofón a esta noche de conciertos express, con media hora escasa para cada uno, apareció en escena El Guincho. El artista invitado. El rey del pop tropical y de los sonidos étnicos siempre con ganas de ser distinto y sorprender, algo que se agradece dentro del panorama musical de este país. Y eso hicimos, divertirnos con su música, porque para eso esta El Gincho, para hacernos mover las caderas a ritmo de su teclado multiusos y de temas como ‘Bombay’. De camisas de cuadros y de juegos de sonidos que consiguen transportarte por un momento a cualquier playa del Caribe o como nos dice en su vídeo…al cosmos.
Un buen final, que nos dejo a todos con un buen sabor de boca y con ganas de continuar. Donde nos llevara el viento……y la buena música.
