La película, que se estrena el 5 de noviembre, sorprende y llega al alma a través de las aventuras de sus protagonistas
Los creadores de Mía y el León blanco vuelven con una nueva y conmovedora historia protagonizada esta vez por un lobo y un león. En el momento más inesperado, Alma (Molly Kunz), tiene que volver a la casa de su abuelo porque, lamentablemente, ha fallecido. A pesar de que la protagonista se encuentra bastante preocupada porque pronto tendrá la prueba más importante de su carrera como pianista, decide regresar a la casa de su infancia, localizada en una isla de Canadá.
Tras el entierro de su abuelo, su vida gira bruscamente cuando rescata a un cachorro de león y a otro de lobo. Aunque al principio cuenta con la ayuda de la madre del pequeño lobezno, muy pronto ésta desaparecerá y Alma se verá obligada a tomar una decisión. Como no quiere que le pase nada a los pequeños prefiere no decir nada a nadie. Los tres forman un vínculo inseparable a medida que pasa el tiempo y, cuando todo parece ir genial, su mundo se derrumba al descubrirse su secreto a causa de una fatalidad.
El león es capturado y enviado a un circo ambulante y al lobo se lo llevan unos científicos para investigar. Alma solamente quiere saber que se encuentran bien y por ello no cesa en su empeño por localizarlos. La historia da un vuelco cuando ella descubre que son los propios animales quienes la están buscando. Una vez juntos, emprenden una extraordinaria aventura a través de Canadá de regreso a casa.
Parece absolutamente extraordinario que contra todo pronóstico, incluso oponiéndose a las propias leyes de la naturaleza, estos dos animales consigan estar juntos y se quieran por encima de todo. Una maravillosa historia que enseña el verdadero significado de la familia, sin importar los lazos de sangre.
Información sobre el rodaje de la película
La película está dirigida por Gilles de Maistre, toda una amante de los animales y del medio ambiente, quien quiso desarrollar esta narración por la lucha de conservación de los animales. Además, la película posee actores extraordinarios como Molly Kunz y Graham Greene, nominado a numerosos Óscar. A su vez, son acompañados por dos personajes muy especiales, un lobo y un león, supervisados por el famoso entrenador de animales Andrew Simpson, quien también ha participado en Juego de tronos o en Braveheart.
El rodaje duró más de 15 meses y siguió el desarrollo de crecimiento de los dos cachorros. La película se rodó concretamente en la isla Sacacomie, ubicada en Alberta (Canadá), a tan solo dos horas al noreste de Quebec. Lo más sorprendente de todo es que para la grabación de las imágenes, el equipo estaba en jaulas mientras el lobo y el león andaban libremente por la reserva.
