La artista presentó su obra Corpus en la sala de exposiciones Espacio Cómplices
Son tiempos difíciles para la cultura. Eso está claro. Conciertos cancelados, exposiciones con aforo muy reducido, obras de teatro pospuestas, películas cuyo estreno se retrasa un año… Pero siempre hay luz al final del túnel y las ganas de disfrutar del arte en todas sus formas pesa mucho más que todo lo que está presente en el ambiente. Muchos son los artistas que demuestran que la cultura sigue viva y la sociedad quiere que lo siga estando. O igual lo necesita.
Celia Gallego es un claro ejemplo de ello. Esta joven artista vallisoletana ha tenido la “suerte” de exponer parte de su obra durante la pandemia que estamos viviendo. Y digo “suerte” porque todo su esfuerzo ha dado sus correspondientes frutos, y esos frutos han sido poder presentar Corpus al público en la sala de exposiciones Espacio Cómplices, en Lavapiés. Corpus es una colección de 12 cuadros creados en óleo sobre lienzo, sobre papel o madera cuyo común denominador es el cuerpo humano y en la que podemos disfrutar de retratos, ojos y manos hechos con tanto mimo y cariño que es casi palpable.
Primavera, Verano, Otoño e Invierno es una serie de cuatro piezas que representan las estaciones del año a través de la figura de mujeres muy dispares. Es de las más admiradas de la colección junto con Venus, que tampoco se queda atrás. Un óleo sobre lienzo de 150 centímetros de alto que representa una recreación de la Venus de Botticelli y que desde luego no deja indiferente a nadie, y no solo por su tamaño. Tiene varios elementos escondidos por el cuerpo de la protagonista, todos ellos con su correspondiente significado.
Los ojos forman una parte muy importante de la colección. La artista los define como «una parte fundamental de su obra», ya que es lo que más pinta. En la sala Cómplices hay expuestos cuatro, en óleos circulares y de diferentes tamaños. «Llevo pintando ojos desde muy pequeñita. Empecé por casualidad y resulta algo terapéutico para mí. Quise mostrar lo que son las miradas sin necesidad de pestañas, párpados, ni gestos, simplemente el centro del ojo, es decir, el iris y la pupila», afirma.
Anxiety es la primera pieza de una colección que va a empezar a crear la autora, cuyo tema principal es la representación de diferentes estados mentales. Este retrato en concreto muestra la ansiedad y es un óleo sobre lienzo en el que se puede ver cómo el humo de un cigarrillo tapa las orejas al protagonista y crea una nube por encima de su cabeza, impidiéndole ver el espacio cálido en el que se encuentra, representado con color rosa.
Manos de la creación es una obra que nació en 2016 y es de las más valoradas por el público ya que se han vendido alrededor de 200 reproducciones. Esta pieza hecha en óleo sobre papel tiene otra versión en la que se le han añadido unas flores de forma digital. «Es uno de los cuadros que más cariño tengo», ha confesado Gallego.
Despedidas tiene un significado muy potente. Lo pintó durante la cuarentena, una etapa que pasó junto a su pareja, y quiso representar la suerte de haber podido vivir ese tiempo tan difícil junto a ella. En esta pieza podemos apreciar e incluso casi sentir la calidez que transmite el abrazo que se dan los dos protagonistas de la obra.
En todos y cada uno de los cuadros se aprecia un estilo claramente definido de la autora, que deja su sello personal en cada pincelada. Actualmente, su arte está enfocado en el óleo y los retratos, pero la artista no descarta ir evolucionando en otras direcciones.
Como los periodistas de la vieja escuela que ven una historia que contar hasta en el supermercado, Gallego asegura que encuentra la inspiración en todas partes: «En redes, en libros, novelas, series, películas, conversaciones con amigos y mi pareja. Prácticamente todo puede hacer que se me encienda la bombilla y que una idea nazca en mi cabeza».
Gallego ha confesado que esta exposición ha sido un poco diferente a otras que ha hecho anteriormente debido a las medidas de seguridad. «El aforo era limitado a seis personas. Pero gracias a esto, he podido tener un trato más cercano con el público, pudiéndoles explicar la obra, creándose así un ambiente mucho más íntimo y ofreciendo un trato más personal». La artista asegura que, pese a la pandemia, ha notado que ha ido mucha gente a la exposición, incluso más que a otras. «Ahora con todo esto, ante cualquier actividad cultural la gente se anima mucho», sostiene.
La artista tiene además un canal de YouTube dedicado en su totalidad al arte, donde hace tutoriales, da charlas, habla sobre Historia del Arte y todo ello con un carácter feminista. Durante la cuarentena dedicó varios vídeos de su canal a dar ideas de ejercicios de pintura para que la gente los hiciera en sus casas «para que la pintura les sirviera de terapia». Y añade: «Mis seguidores fueron muy agradecidos con estos vídeos y, además, noté una subida en las visitas».
En su canal de YouTube, la artista tiene un vídeo dedicado a cómo comenzar a hacer exposiciones. «Parece algo muy complejo, pero realmente es algo natural», afirma. En primer lugar, se realiza el proceso de selección de las obras y se busca un nexo común. «En este caso, el nexo es el cuerpo, por ello la llamé Corpus», sostiene Gallego.
En esta exposición en concreto, el comisariado lo llevaron a cabo desde la galería. Ellos eligieron la disposición de las obras y el número de piezas a exponer. La artista se encargó de hacer una redada de medios y de toda la gente que pudiera interesarse en la obra, así como de enviar la nota de prensa para mover la inauguración.
Ahora solo falta esperar a su próxima exposición, que seguro que tiene lugar muy pronto. Pero mientras tanto, en su página web se pueden contemplar muchas de sus obras y comprar algunas de sus láminas —muy solicitadas— para tener así un pedacito de sus piezas en casa.
