‘Ghost, el musical’ hace las maletas

Arrancan las últimas semanas de este mágico espectáculo en Madrid, antes de iniciar su recorrido por otras muchas ciudades de nuestro país. Ela Ruiz, la actriz que interpreta a la hilarante pitonisa Oda Mae Brown, nos lo cuenta.

Amor más allá de la muerte. Una terrible tragedia con final feliz. Y la extraordinaria Unchained Melody dando alas a nuestros corazones. Tres décadas después de su estreno en cines, Ghost, la conmovedora historia de Sam y Molly, continúa fascinando al mundo. Y cuando un clásico de semejante magnitud es llevado al teatro, y más concretamente al formato musical, el éxito está asegurado.

El estreno de esta obra tuvo lugar en la Manchester Opera House, en 2011, y al año siguiente comenzó a representarse en el famoso circuito neoyorkino de Broadway. Tras esto, el musical inició un exorbitante recorrido a lo largo de Estados Unidos, Europa, Asia y Australia, acumulando una larga lista de premios.

Y por fin, después de tamaña trayectoria internacional, el musical aterrizó en Madrid en octubre de 2019 de la mano de la productora Let´s go y otros patrocinadores, para hacer las delicias tanto de los propios madrileños como de todas las personas que han viajado hasta la capital desde infinidad de rincones de nuestro país para disfrutar de este hechizante espectáculo que no deja indiferente a nadie.

Un romance “inmortal”

Sam y Molly son una feliz pareja que reside en la ciudad de Nueva York. Él es un acomodado ejecutivo financiero, y ella una talentosa escultora de cerámica. Son jóvenes, gozan de buena salud y de un trabajo que les gusta, acaban de mudarse a un enorme y diáfano apartamento… En resumen, ante ellos se extiende un venturoso horizonte cargado de dicha e ilusión, y tienen toda la vida por delante para disfrutar juntos de su amor.

Su relación solo tiene una pequeña fisura: a Sam le cuesta decir “te quiero”. Cada vez que Molly manifiesta verbalmente sus sentimientos hacia su amado, él se limita a responder “ídem” (vocablo que posteriormente tendrá gran importancia en el desarrollo de los acontecimientos). Esto molesta a la joven, ya que para ella es importante oír un “te quiero” de los labios de su novio, a lo que él replica que hay otras maneras, mucho más importantes, de demostrarle todo el amor que siente por ella.

No obstante, la entrañable pareja está a punto de ver cómo su idílica vida se deshace en pedazos. Una fatídica noche, cuando ambos vuelven a casa tras ver una obra de teatro, un maleante, de nombre Willy López, los asalta con el propósito de robar la cartera de Sam; y este, en medio del forcejeo, recibe accidentalmente un disparo que acabará con su vida.

Al principio el protagonista no es consciente de lo que acaba de ocurrir. Durante unos segundos persigue al malhechor, que huye del lugar del crimen a toda velocidad, pero al dar media vuelta para regresar con Molly, contempla cómo su propio cuerpo yace inerte en el suelo, con ella a su lado completamente desolada y pidiendo auxilio. A continuación, una luz celestial comienza a brillar sobre él, dándole la oportunidad de entrar al Paraíso. Sin embargo, él la rechaza, debido a que no quiere abandonar a Molly. Así pues, la luz desaparece y Sam queda convertido en un espíritu errante.

*Alerta spoiler

Tras esto, Sam llegará a averiguar que el ataque que causó su muerte había sido previamente planeado por su compañero de trabajo y mejor amigo, Carl, con el propósito de obtener una clave informática que le permitiría acceder a una gran suma de dinero blanqueado, ni más ni menos que cuatro millones de dólares.

A partir de entonces, con el objetivo de detener a Carl y proteger a Molly, el protagonista se ve envuelto en una trepidante espiral de descubrimientos sobre su nueva condición de fantasma y los poderes sobrenaturales de los que dispone. Contará con la ayuda de la alocada y terriblemente divertida Oda Mae Brown, una fraudulenta pitonisa que, tras toda una vida estafando a crédulos clientes con sus supuestas facultades de vidente, descubrirá que realmente ha heredado la capacidad de hablar con los muertos, propia de su familia, y que hasta la fecha ella nunca creyó tener.

La historia concluye con el que sin duda es uno de los más románticos y conmovedores finales de la historia del cine. Un catártico desenlace por todos recordado en el que el protagonista, tras haber podido por fin despedirse de su amada, parte hacia el Reino de los cielos llevándose con él su amor para toda la eternidad.

Ghost, el musical, en palabras de Ela Ruiz (Oda Mae Brown)

Ela Ruiz lleva a sus espaldas 24 años de carrera en compañías de danza y teatro musical. Esta talentosa actriz y bailarina cubana se graduó en danza contemporánea en la Escuela Nacional de Artes de La Habana. No obstante, casi toda su carrera artística ha transcurrido en España, y su trayectoria abarca una larga lista de espectáculos musicales. “Mi primer musical fue Hoy no me puedo levantar, de Mecano, ¡y a partir de ahí he hecho uno detrás de otro! Estuve en Jesucristo Super Star, después hice Fiebre del sábado noche, más tarde Chicago y, posteriormente, estuve siete años en Lío Ibiza, que fue donde di el salto de elenco a ser una de las cantantes principales”, revela a Cultura Joven.

“Tras esto, estuve en Heart Ibiza, que era un dinner show de los chefs Albert y Ferran Adrià, y un año después, hice por fin el casting para Ghost y me cogieron de Oda Mae. Aquí es realmente donde he podido experimentar más la interpretación, que era la última de las asignaturas que me quedaba pendiente por profundizar”, afirma. “Llevo toda mi carrera siendo bailarina y cantante, pero nunca me había metido de lleno realmente en prepararme un personaje, en probarme como actriz, y creo que está siendo una de las experiencias más maravillosas de mi vida, así que estoy muy agradecida”.

Cultura Joven: ¿Cómo ha vivido personalmente esta experiencia?

Ela Ruiz: Estoy muy feliz porque este ha sido mi primer papel protagónico en un musical, y he crecido mucho desde entonces. Han pasado casi tres años y he aprendido muchísimo por el camino, así que es una de las experiencias más enriquecedoras de mi carrera, sin duda.

C.J: ¿Cómo está viviendo el equipo estas últimas semanas en Madrid?

E.R: Muy emocionados, porque estos últimos meses han sido muy intensos. Habíamos estado un año y medio fuera de los escenarios porque los musicales de gran formato desaparecieron con la pandemia. Y en momentos tan críticos, a veces realmente temes no volver a hacer tu trabajo nunca más, es una sensación que no le deseo a nadie. Así que para nosotros esta temporada ha sido muy especial, y también estamos muy ilusionados ante el comienzo de la gira.

C.J: ¿Qué tal ha sido trabajar con Bustamante y Ricky Merino?

E.R: ¡Maravilloso! Creo que cuando profesionales que no se dedican desde siempre al teatro musical (al contrario que personas como yo) experimentan este concepto, es muy enriquecedor tanto para ellos como para nosotros. Ellos por su parte aprenden mucho, pero nosotros también, porque ver nuestro trabajo, todo lo que hacemos, lo que nosotros ya hemos naturalizado, a través de sus ojos, es diferente. Empiezas a apreciar cosas que no te habías dado cuenta de que tenían tanto valor, y al contrario también.

Además, al ser tanto Bustamante como Ricky Merino cantantes muy famosos en este país, ambos nos han ayudado a atraer a un público que normalmente no consume teatro musical, y eso hace un gran favor a mi gremio.

C.J: ¿Cómo definiría la personalidad de Oda Mae? ¿En su opinión qué tiene ese personaje que hace que a todos nos fascine tanto desde siempre?

E.R: Yo creo que lo más gracioso de Oda Mae es el drama que está viviendo mientras el público se ríe. Ella tiene montado su tinglado de médium, y su vida se revoluciona precisamente cuando empieza a escuchar muertos de verdad. Por otro lado, opino que la película hace mucho hincapié en el racismo y las desigualdades sociales de la época, que siguen presentes hoy en día en todo el mundo, en mayor o menor medida.

En realidad, Oda Mae no es más que una mujer que trata de sobrevivir y tiene montado su circo de vidente para poder comer. Y es que los seres humanos en el fondo somos muy simples: todos queremos que nos quieran, todos queremos comer, todos queremos vivir en paz… y esta mujer, cuyas circunstancias no han debido ser fáciles, simplemente está tratando de salir adelante. En el fondo es una mujer tremendamente honesta y auténtica, eso es lo que la hace ser tan querida y la convierte en un personaje de referencia dentro de este musical.

C.J: ¿Cuáles son sus escenas favoritas de Oda Mae?

E.R: Para mí la escena más difícil, que al mismo tiempo es la que más disfruto, es la del apartamento, en el primer acto, cuando Oda Mae por fin logra convencer a Molly de que puede escuchar a Sam. Es la primera vez que están ellos tres juntos, y Sam intenta comunicarse con Molly por medio de Oda Mae. Esa escena es muy rápida, tiene muchísimo texto, muchísimo ritmo, y tenemos que estar muy involucrados los tres. Y yo creo que ahí es donde se puede percibir a Oda Mae en todo su esplendor y con todos sus contrastes.

C.J: ¿Qué representa para usted la película de Ghost? ¿Cómo se preparó para este personaje tan emblemático?

Creo que yo solo vi la película una vez cuando era pequeña, pero cuando entré a formar parte del musical vi la peli dos veces para preparar bien el personaje. Ghost es una película tremendamente famosa, todo el mundo la conoce, y eso es maravilloso.

¡Pero también tiene su peligro! Porque el público espera la misma grandeza de la película también en el musical. En mi caso, todo el mundo espera ver en mí a Whoopi Goldberg, y yo no puedo ser literalmente Whoopi Goldberg, para empezar porque físicamente no me parezco en nada a ella y, además, yo tengo mi acento cubano, pero sí quiero que en mi actuación se perciba una clara referencia a Whoopi. Y de alguna manera hay algo que yo hago que consigue que la gente conecte con esa memoria que tiene de la película de Ghost, porque la acogida ha sido súper guay, y eso a mí me hace inmensamente feliz.

Programa

Horarios:

• Miércoles y jueves a las 20:30
• Viernes y sábado a las 18:00 y 21:30
• Domingos a las 18:00

Precios:

Desde 32,31€ hasta 74,90€ (zona preferente).

Turnos de David Bustamante vs Ricky Merino:

Hasta el 20 de febrero, Bustamante actuará los días: 6, 11, 13, 18 y 20 a las 18:00h. 2 y 9 a las 20:30h. Ricky Merino representará el resto de las funciones.

*El elenco puede sufrir cambios y modificaciones sin previo aviso.

Duración:

2 horas y 20 minutos, con descanso de 15 minutos incluido.

Gira 2022:

• A CORUÑA – Palacio de la Ópera, del 25 al 27 de febrero.
• VIGO- Auditorio Mar de Vigo, del 3 al 6 de marzo.
• SEVILLA- Fibes, del 10 al 13 de marzo.
• ZARAGOZA- Palacio de Congresos, del 17 al 20 de marzo.
• MURCIA- Auditorio Víctor Villegas, del 24 al 27 de marzo.
• PALMA DE MALLORCA- Auditorium, del 31 de marzo al 3 de abril.
• VALENCIA- Teatro Olympia, del 14 de mayo al 12 de junio.

¡Y próximamente en más ciudades!