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Conociendo a José Hierro, el poeta de los vencidos

Fotografía de José Hierro
Fotografía de José Hierro. Fuente: Matadero de Madrid

Como cierre del centenario del nacimiento de José Hierro, el pasado 30 de marzo se realizó un último acto para descubrir más a fondo la figura y vida del poeta. Fue en el preestreno de «José Hierro, el poeta de los vencidos», un documental producido por RTVE y cuya dirección está en manos de Marcos Hernández Juanma Jiménez.

El visionado se realizó en la Cineteca del Matadero de Madrid, en la sala Azcona, con un coloquio posterior en el que participaron los directores y Marián y Joaquín Hierro, hijos del poeta. La noche del 2 de abril se estrenó en el programa Imprescindibles de la 2 y está disponible en la web de RTVE Play.

Nacido en Madrid, el 3 de abril de 1922, José Hierro se mudó a los dos años a Santander, por motivos profesionales de su padre. Es por ello que se consideraba más «montañés» (cántabro) que madrileño. Poeta, crítico de arte, listero, repartidor de leña a domicilio o locutor de radio, fueron solo algunos de los trabajos que tuvo Pepe Hierro, como le llamaban sus amigos y familiares. Pero él podía ser cualquier cosa sin olvidarse de los que tenía a su lado. Estuvo en la cárcel después de la Guerra Civil y nunca fue rencoroso, tenía una parte ética, humana, comprometida y social, que sería con la que muchas personas de su entorno le recordarían y recuerdan.

«Quiero que mi poesía sea una poesía, o he querido siempre, que parezca más una confidencia que una obra de arte»

José Hierro en un vídeo de archivo del documental.

Luis Alberto de Cuenca, Yolanda Soler Onís, Jorge Obrero, Elsa López o Juan Cruz, son algunos de los rostros que aparecen aportando testimonios o historias del poeta. A la poesía del montañés le ponen voz Pepe Viyuela y Leonor Watling. A su vez, se ilustran visualmente los poemas, tarea que para los directores no ha sido sencilla: «nos hemos arriesgado», comenta uno de ellos. Un completo acierto hacerlo de tal forma y la música acompaña de manera perfecta la narración.

«Lo único negativo, yo diría, de todo el documental, es el no haber conocido a José Hierro», destaca Juan Jiménez. Y es que él asegura haberle tratado más como personaje que como poeta durante los seis meses de preparación del documental. En el caso de Hernández, sí lo conoció: «yo tenía cierto contacto con él, José Hierro venía todos los años a dar un premio de poesía al Instituto José Hierro, tenía cierta cercanía con él, pero conocía su faceta poética no la humana».

Marcos Hernández se sorprendió ante la gran cantidad de archivo que había del poeta en TVE. «Algunas imágenes estaban pérdidas y no estaban digitalizadas, por desgracia hay algunas que se han perdido porque estaban en mal estado. Se ha rescatado una pequeña parte», indica.

Durante la hora en la que transcurre el documental, se encuentran imágenes y vídeos sobre la casa del poeta Nayagua («no hay agua»), en la que Hierro recibía a sus amigos y familiares, e incluso producían vino. Los bares de Madrid («su oficina») y Santander en los que se ponía a escribir. Hay entrevistas del poeta en diversas radios y televisiones. A la vez que el discurso que dio al recibir, en 1981, el Premio Príncipe de Asturias de las Letras. También las hay sobre la ceremonia del Premio Cervantes en 1998, con la publicación de Cuaderno de Nueva York.

JOSÉ HIERRO EN EL PREMIO PRÍNCIPE DE ASTURIAS DE LAS LETRAS 1981
José Hierro en la ceremonia del Premio Príncipe de Asturias de las letras en 1981. Fuente: Fundación Princesa de Asturias.

A este último acto han acudido más personas de su entorno, como sus nietas, que tuvieron oportunidad de hablar sobre su relación familiar: «hemos tenido el mejor abuelo que se puede tener», expresa Tacha Romero, una de ellas. «Nos dedicaba tiempo, nos escuchaba, se sentaba con nosotros», recuerda otra, Hortensia Hierro. «Yo era muy pequeña, pero se me ha quedado marcado mucho mi abuelo, me acuerdo de su voz. De hecho yo ahora pinto, creo que fue él quien me lo inculcó», asegura una tercera nieta, Helena Hierro. Tampoco ha faltado recordar y destacar la labor de su abuela, ya que acompañaba y ayudaba a José Hierro.

Julieta Valera, la directora técnica de la Fundación Centro de Poesía José Hierro, fue la encargada de cerrar el último acto del centenario. Tras agradecer el trabajo a los familiares, directores y RTVE, concluyó: «creo que Hierro vive y que viva Hierro en su poesía».

Fundación Centro de Poesía José Hierro

La Fundación Centro de Poesía José Hierro está ubicada en Getafe. Julieta Valera lo define así: «es como José Hierro: pública y un lugar de convivencia no jerárquica de escritura. La gente que cree que necesita la poesía para vivir y otras formas de expresión, ahí tiene un lugar de escucha». En él se realizan diversas actividades, la próxima será el 12 de abril con Antonio Méndez Rubio presentando Tanto es así y ¿Un lugar sin lugar? La poesía de Antonio Méndez Rubio, de Raúl Molina.

José Hierro recitando su poema Despedida, de Cuaderno de Nueva York

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