50 años Serratianos

En diciembre cumple 71 y en febrero 50. 71 velas por cada año vivido y 50 por cada uno dedicado a la música.

Joan Manuel Serrat cumple medio siglo de su primera aparición artística en público. Fue una mañana de un 18 de febrero de 1965, en el estudio Toresky de Radio Barcelona. Salvador Escamilla presentaba en su programa Ràdioscope a un joven de Poble Sec, un barrio de Sants-Montjuïc, que había compuesto algunas canciones en catalán.

Fue allí donde sonó por primera vez ese nombre compuesto con apellido catalán y voz tierna, y apenas tres meses después, ya tenía un disco con una de las mejores discográficas catalanas del momento (discografía Edigsa) y varios conciertos preparados, el primero, en mayo en Esplugues de Llobregat.

Desde entonces, aquel joven catalán que solo quería cantar en la radio, terminó convirtiéndose en un mito de la música española y llevando sus más de 600 temas por medio mundo.

Ahora cumple 50 años de trayectoria y lo hace con un cuádruple volumen bautizado como Antología Desordenada. Casi medio centenar de canciones se recogen en este último trabajo y quizá por eso de que no se siente “ni amo ni rehén” de ellas, la mayoría, las ha compartido con otros artistas a modo de duetos.

Calle 13, Les Luthiers, Pablo Alborán, Lolita Flores, Estopa o Alejandro Sanz son solo algunos de los que han compartido partitura con Serrat en esta antología desordenada. Pero los que no podían faltar son, sin duda, su familia inseparable de escenarios, de vinos y de vida: Ana Belén, Victor Manuel, Miguel Ríos, Aute y su Sabina.

Una de las colaboraciones que más ha sorprendido ha sido la del dueto con el presentador Andreu Buenafuente con la canción Perque la gent s’avorreix tant. La agencia EFE cuenta cómo uno de los medios que asistió a la rueda de prensa afirmó eso de: “si sólo es presentador” a lo que Serrat respondió: “También es un presentador, pero es un artista. Escúchelo y lo entenderá”.

Una mezcolanza de artistas tan heterogéneos que da como resultado un disco completo, diferente, enriquecedor y actual. “No se trata de una recopilación de canciones sino de una puesta al día de las mismas, con arreglos de ahora y con mi voz de ahora”, ha asegurado Serrat en una multitudinaria rueda de prensa celebrada en la Casa de América de Madrid.

Solo algunas se han quedado intactas, como Hoy puede ser un gran día o Aquellas pequeñas cosas. Canciones, que según él:

«Son sencillamente irrepetibles y no mejorarían nada si se volvieran a grabar».

A partir de febrero de 2015 le esperan más de noventa escenarios repartidos por España y América, hasta noviembre que terminará la gira y todos volverán a quedarse con más ganas de Serrat.

Él, el maestro que se sentó en una calabaza para escribir poemas sobre las pequeñas cosas. El de Penélope, el de Lucía y el de Princesa. El que no hace otra cosa que pensar en ti mientras corren los locos bajitos entre sus piernas. Pero sin duda, el de los versos empapados de paraules d’amor, que alguna vez todos han recitado a su amada.

Él, el de corazón catalán, mediterráneo en las venas y alas hechas de libertad cumple 50 años con la música por religión y quién mejor que él, aun siendo desordenada, para hacer su propia antología.

Aquí podéis consultar el especial que El País ha realizado a estos 50 años del cantante en la música.