INSTRUCCIONES PARA SALVAR EL MUNDO

Salvar el mundo es posible. Pero no sólo eso, además, es fácil y factible, podemos conseguirlo. Tan sólo basta con continuar la pauta que nos muestra Rosa Montero que, como en otras tantas ocasiones, nos lleva de la mano al enseñarnos el camino mientras, hoja a hoja, nos explica que lo mejor sigue, por desconcertante que parezca, estando en aquello que de tan sencillo pasa desapercibido.

Con Instrucciones para salvar el mundo nos sumerge en la narrativa de lo simple y lo cotidiano gracias a al arte de su pluma, que hila con una perfecta minuciosidad las vidas e historias de los personajes. El resultado es una novela embaucadora, emocionante y perfectamente planteada que no necesita de estridencia alguna. Y aquí radica precisamente la clave de su éxito. Un éxito más improbable de alcanzar cuando los elementos de la composición y la estética de la historia son grises, carecen de una luz que la palabra de la escritora les devuelve, consiguiendo así una novela que se permite traspasar la mente y tocar la sensibilidad del lector.

El alma de los personajes rocía el transcurso de los acontecimientos con un ambiente sensible (que no “sensiblero”) y permite al que asiste a su relato acercarse más a unas vidas trágicas que el destino se encargará de unir. Por un lado encontramos a Matías, taxista, hundido por la muerte de su mujer. Por otro, a Daniel, médico, que pasa sus días frustrado con su abúlico presente. Ambos se conectarán inesperadamente gracias al azar de la existencia humana y a Fatma, una prostituta que dará significado a sus historias e indirectamente cambiará la vida de ambos. Con el sello característico de la prosa de Rosa Montero, los personajes se presentan con elaboradas descripciones que hacen que el lector pueda disfrutar de lo mejor y lo peor de sus inquietudes, deseos, miserias y glorias. Sin grandes giros en el argumento, cambiarán y descubrirán el verdadero significado de la vida y la importancia que tienen sus actos en el devenir de la historia.

Gracias a un lenguaje sencillo, pero intenso y profundo a la vez, la autora plantea en tercera persona los paralelismos de la existencia humana en un trasfondo de realidad que hace extremadamente apetecible la inmersión en el argumento. De cerca, temas sociales de nuestros días como el cambio climático, la inmigración, la prostitución o la insensibilidad de la sociedad hacia los mayores, nos presentan un entorno hostil pero esperanzadoramente mejorable que bajo el cielo de Madrid surge y envuelve a los protagonistas de esta cercana aventura.

Sin estridencias narrativas ni verbales, narrada en tiempo real, en el que son fundamentales el aquí y el ahora, Instrucciones para salvar el mundo se perfila como una novela intrigante, pero amable y sincera, que sabrá mantener la atención del lector y atraparlo en la lectura sin desviar ni un solo instante su interés, demostrándonos que también las pequeñas historias pueden hacer grande a un libro.