Durante los primeros días del confinamiento me topé con un tuit que aludía a uno de mis programas radiofónicos favoritos y a la gestación de la última entrega de la emblemática saga `El Crack´ de José Luis Garci, estrenada el año pasado. El tuit en cuestión lo firmaba el guionista y director de cine Javier Muñoz (Madrid, 1967), hasta entonces desconocido para mí, y en él reconocía que, tras haber sido invitado al programa Cowboys de Medianoche en el año 2015, animó al experimentado cineasta a volver a la dirección con una precuela de `El Crack´. Por aquel entonces, Muñoz acababa de estrenar su primera y única película hasta el momento: `Sicarivs: la noche y el silencio´. Lo que parecía un acto de presentación de su obra acabó siendo, además, el germen de `El Crack Cero´; un colofón para el personaje de Germán Areta que en su día encarnó Alfredo Landa y del que Carlos Santos se encarga en esta última ocasión. Mano a mano, José Luis Garci y Javier Muñoz se aventuraron a escribir las primeras andanzas del detective privado más carismático del cine patrio.
Por su parte, `Sicarivs: la noche y el silencio´ es una película poco común en el cine español. Un thriller de sicarios con rasgos del cine negro americano más clásico. El asesino silencioso, la sordidez nocturna, la timba de póquer, el prostíbulo…un submundo que quizá no ha sido lo suficientemente explotado en España. Ahora, Javier Muñoz pretende dar continuidad a su ópera prima y ya prepara la segunda parte de `Sicarivs´ contando, al igual que en la primera entrega, con Víctor Clavijo como principal protagonista. Lo anunció hace unas semanas en redes sociales, e incluso ha anunciado un casting online para componer parte del reparto. Sobre este nuevo proyecto, su participación en `El Crack Cero´ y su forma de ver el cine nos habla en esta entrevista.
Cartel de la película «Sicarivs: La noche y el silencio»
C.J: ¿Qué nos puede decir de la secuela de `Sicarivs´?
Javier Muñoz. Se ha disparado estos días el interés de la secuela cuando todavía está en pañales. El guion lo tengo escrito y el reparto principal está cerrado. Ahora comienza la lucha con las televisiones, que son las que, al fin y al cabo, ordenan y mandan sobre el tipo de cine que se hace en este país. La segunda parte de `Sicarivs´, si logro sacarla adelante, se diferencia en que hay menos voz en off y en que nuestro protagonista Víctor Clavijo viene acompañado de otra sicaria. También voy a intentar que la nueva entrega sea más espectacular que la primera, con más acción y tiroteos.
C.J: La empresa de buscar financiación y televisiones puede ser aún más complicada que construir la propia película, ¿verdad?
J.M. En España es la parte más complicada y, sobre todo, la más frustrante. Yo escribo un guion, hablo con los actores y se comprometen a participar; hablo con los productores y también les gusta, me dan un adelanto… En cualquier otro país ya haría la película. Aquí no. Ahora toca mandarlo a un comité de televisión y este decide si sale adelante. El rechazo de una televisión no es que entorpezca el proyecto: directamente te lo hunde. Porque para poder ir a las subvenciones del Ministerio necesitas que la película esté aprobada por una televisión; para ir a una distribuidora y para ir a otras plataformas también necesitas eso. Por tanto, el proyecto se puede hundir si no consigues el visto bueno de las tres televisiones grandes, es decir, TVE, Antena 3 y Telecinco. Ahora hay otras vías como son las plataformas, pero han llegado a este país y de momento no arriesgan nada: buscan a directores consagrados y dejan muy poco margen al resto.
C.J: Su primera película se puede ver de forma gratuita en la web de RTVE. ¿Ha notado mayor repercusión, sobre todo en estos meses de confinamiento?
J.M Sí. El estreno de la película, en cuanto a repercusión, fue de forma semejante al 90% de películas que se estrenan aquí: con una discreta acogida y tras pasar un par de semanas por las salas comerciales. Ya cuando salió al año siguiente en Blu-ray obtuvo algo más de cariño y se convirtió en una especie de película de culto. También tuvo pases televisivos en Telemadrid y Televisión Española y, desde entonces, se puede ver de forma gratuita en la web de RTVE. Y es verdad que con el confinamiento ha tenido más repercusión, también gracias a la promoción que Víctor Clavijo y yo hemos hecho en redes sociales.
C.J: Hace cinco años que estrenó la primera parte. Echando la vista atrás, ¿cree que se cumplieron las expectativas que tenía propuestas?
J.M A nivel creativo sí. Lo bueno de hacer cine independiente y que te ampare Televisión Española es que te da una libertad absoluta a nivel creativo. Por eso, dentro de las limitaciones presupuestarias hice la película que tenía en la cabeza.
C.J: Estos días ha lanzado un casting online para completar el rodaje. ¿Se nota la diferencia entre hacerlo así o de forma presencial?
J.M En realidad, el origen de los repartos es muy parecido. Cuando hice `Sicarivs: la noche y el silencio´ tenía un director de casting que me enseñaba fotos y vídeos para los papeles pequeños. A partir de ahí, yo proponía los perfiles que más me encajaban. Por tanto, ese proceso que estoy haciendo ahora es muy parecido.
C.J: Ahora me gustaría preguntarle por `El Crack Cero´, ¿qué ha supuesto para usted trabajar mano a mano con Garci en una saga tan emblemática?
J.M Para mí ha sido el final de un trayecto vital. `El Crack´ era una de mis películas favoritas. Yo no pertenecía a esa generación cuando se estrenó en el cine, pero al poco tiempo la alquilamos en casa y me quedé anonadado con ella. Yo pensaba: ¿pero realmente se puede hacer este cine aquí en España? Era un tipo de cine que bebía del americano, del detective privado, de personajes como Humphrey Bogart o Robert Mitchum. Para mí, es la mejor película española que se ha hecho nunca. Entonces, tener la oportunidad de trabajar con José Luis y a partir de esos personajes que me han acompañado durante toda mi vida es una maravilla y algo que todavía intento asimilar.
Cartel de la película «El Crack Cero», dirigida por José Luis Garci.
C.J: Personalmente, eché en falta alguna nominación de `El Crack Cero´ en los Goya, ¿Están decepcionados con esto?
J.M. Bueno, la decepción siempre te queda, pero es algo que teníamos asumido. El tipo de producción de la película, tal y como dijo el propio Garci, era “una serie B Noir”. Estaba planteada como una obra pequeña y no esperábamos gran cosa. Pero la verdad es que nos quedó muy bien y los actores están fantásticos. Garci dirige como Howard Hawks en esa forma de hacer cine negro americano y la película está hecha para que sientas lo que sentían nuestros abuelos cuando iban al cine.
Por otra parte, es verdad que era complicado estar ahí, porque estaba Almodóvar, Amenábar…, pero al sistema de votación de la academia habría que darle una vuelta. Es decir, yo respeto profundamente a quien le pueda gustar más la película de Amenábar o Almodóvar, pero ¿merecen estas películas 17 nominaciones? Yo creo que hay que votar por categorías, dejando a un lado lo mucho que te haya gustado la película. Siempre pongo el ejemplo de `Piratas del Caribe´: cinematográficamente no aporta mucho, pero tiene un vestuario, unos efectos y una dirección artística que sí merecen la pena y por ello son recompensados con premios Oscar. En nuestro caso, creo que al menos Carlos Santos, Miguel Ángel Muñoz y la fotografía deberían haber estado nominadas.
C.J: Hay muchos tintes de cine negro tanto en la saga de `El Crack´ como en `Sicarivs´, sobre todo en la primera. ¿Cree que en España se ha explotado poco este género?
J.M. Creo que aquí se ha ido más hacia el thriller patrio, con películas como `El Niño´, `No habrá paz para los malvados´, `Tarde para la ira´…, que sinceramente están muy bien. Pero salvo Garci y yo en algunos apuntes de mi `Sicarivs´ no se ha ahondado mucho en ese cine que, siendo thriller, ahonda más en el negro, lo que podría ser como el Polar Francés. Y creo que España podría haber dado también este tipo de cine, sin copiar, pero que se podría acercar a ese submundo de sicarios, de corrupción, de los bajos fondos…Quizás es porque incomoda reconocer que ese submundo también existe aquí.
C.J: ¿Cuáles son sus referentes internacionales y qué directores le han inspirado?
J.M. Por edad, empiezo a ver cine a finales de los 70 y principios de los 80. Por eso, me marcó mucho el cine de Scorsese, Spielberg, Coppola, De Palma, Eastwood… ese es el cine con el que yo me hago cinéfilo, y a partir de ahí empiezo a echar la vista atrás y descubro las grandes obras del cine clásico.
A nivel creativo, me inspira sobre todo el cine de los 70. Pienso que es la última década donde se hacía cine con una libertad absoluta. Por ejemplo, `Perros de paja´ de Sam Peckinpah es una película impensable hoy en día. Y no hay que olvidar que se trata de ficción. Por eso me apena que hayamos perdido esa libertad creativa que sí había antes.
C.J: Usted que tiene esa doble labor de guionista y director, ¿con qué faceta disfruta más?
J.M. Son muy diferentes. A mí escribir me gusta desde que tenía diez años. Y dirigir, por esa inquietud que he tenido siempre por contar historias, también. Hay guiones que escribo y sé que son para otra persona, pero con `Sicarivs: la noche y el silencio´ lo tenía claro: o la dirigía yo o se hacía.
C.J: ¿Qué importancia le da a la crítica cinematográfica?
J.M. La crítica la respeto, pero no siempre la comparto. Al final, no deja de ser un gusto. Yo respeto las críticas con análisis pormenorizados de la técnica narrativa. Pero lo que creo que es un error es el basar la crítica en algo que te ha gustado o no.
C.J: Ahora que atravesamos momentos complicados, ¿cómo ve el futuro a corto y medio plazo de la industria cinematográfica en España?
J.M. Como siempre digo, el cine siempre está en crisis. El problema es que nuestra sociedad vive demasiado al día y pensamos que esto va a durar diez años. Pero vamos a pasar unos meses complicados, quizá un año, y todo volverá poco a poco a la normalidad en los diferentes sectores económicos. Excepto en el cine, que seguirá en crisis.
