Color, color y más color en el ¡Pinta Malasaña! 2017 que llenó las calles de grafitis y amantes del arte urbano.
Resulta imposible pasear por las calles del salmantino Barrio del Oeste sin detenerse cada pocos pasos, sacar el teléfono móvil y tomar alguna instantánea. O sin tropezar con alguien que, con la misma idea, posa frente a alguna de las numerosas puertas
«El grafitero legal no me valía para la novela, quería de protagonista al que se mantiene fuera de la ley, el que opina que si es legal no es grafiti y que las ratas no bailan claqué». Así de contundente y sencillo