“¿Pero eso qué es?”, se preguntarán algunos. “Yo no he visto esa palabra en mi vida”, dirán otros. No la busquen en el diccionario, ya les adelanto que no la encontrarán.
NaNoWriMo es un acrónimo derivado de National Novel Writing Month, es decir, el mes nacional de escribir novelas. Se celebra durante el mes de noviembre y las personas que participan se proponen el reto de conseguir escribir una novela de 50.000 palabras, unas 175 páginas, en tan solo 30 días. ¿Pero eso es posible? Parece ser que sí. Novelas publicadas tan conocidas como Agua para elefantes (escrita por Sara Gruen), y las juveniles Fangirl (de Rainbow Rowell) y Un beso en París (de Stephanie Perkins) surgieron como proyectos durante el NaNoWriMo.
La única norma es escribir sin parar y no corregir lo que se va creando (cantidad sobre cualidad). Eso lo podrá hacer el participante a partir de diciembre cuando la haya terminado. Claro está que hay gente que tiene pensado con antelación tanto el argumento de la novela como los personajes que quieren que aparezcan, no va a ser todo escribir a lo loco.
Si al final de noviembre el participante consigue llegar a las 50.000 palabras, NaNoWriMo le otorga un certificado que acredita que ha superado el reto. ¿Pero cómo se enteran de las palabras que escribe cada uno? Muy fácil. Para participar hay que inscribirse en la página web donde cada usuario actualiza el número de palabras que va escribiendo, pero la novela la escribe en su procesador de textos del ordenador o incluso a mano. “Pero entonces se pueden hacer trampas”, pensarán algunos. Eso ya depende de la ética de cada uno…
En la web hay consejos sobre cómo prepararse para escribir la novela (Pep Talks) de la mano de escritores como Neil Gaiman, Patrick Rothfuss o Diana Gabaldon que pueden servir de inspiración. Igualmente podemos encontrar un foro en español en el que se puede comentar el progreso de la novela y preguntar dudas sobre cómo construir personajes o crear tramas. Además, los participantes utilizan las redes sociales como Twitter para desahogarse a través del hashtag oficial #tuhistoriaimporta y #nanowrimoESP. Incluso las redes sociales oficiales de NaNoWriMo (Twitter y Facebook) se vuelcan en ayudar a los participantes dándoles consejos y animándoles a continuar con sus historias. Así, aunque la tarea de escribir sea solitaria, se hace más amena al compartir la experiencia con los demás.
Para coordinar a los wrimos (así se llaman los valientes que se animan a escribir una novela en un mes), se asigna a una persona por cada país. Es lo que se llama Municipal Liason y este año recae la tarea por segunda vez sobre Jorge Gonzalvo, un escritor, editor y profesor de escritura de Zaragoza. Pero no solo coordina, también se encarga de realizar quedadas y charlas con escritores que aconsejan a los participantes y les animan a seguir con sus novelas.
¿Y de dónde surge esta idea un tanto descabellada? Este proyecto de escritura creativa se le ocurrió en 1999 a un chico de San Francisco (Estados Unidos) llamado Chris Baty. Solo fueron 21 los participantes, pero año tras año ha ido creciendo hasta expandirse por todo el mundo llegando a la cifra de 325.142 participantes el año pasado. En cuanto a España, ya hay 4.152 usuarios registrados, de los cuales 972 participaron en el NaNoWriMo 2014, pero solo 220 consiguieron llegar a la meta.
Si este año quieres ser una de esas personas que en 30 días consigue escribir una novela de 175 páginas prepárate porque el 1 de noviembre comienza la aventura.
