‘Jojo Rabbit’ o la infantilización de Hilter

Fotograma 'Jojo Rabbit'
Fotograma 'Jojo Rabbit'

Pasos. El hombro a detalle con el símbolo de las juventudes hitlerianas. La acción de subirse los calcetines. Y abrocharse el nudo de la pañoleta. Para a continuación ajustar su cinturón.

Un plano asimétrico facial. En una habitación de la ciudad ficticia de Falkenheim, el protagonista de la película conversa consigo mismo frente a un espejo. “Jojo Betzler. 10 años. Hoy te unes a las filas de las juventudes hitlerianas en un fin de semana de entrenamiento muy especial”.

En escena aparece el amigo imaginario de Jojo (Roman Griffi) interpretado por Taika Waititi. Nada más y nada menos que el mismísimo Adolf Hitler. No es solo su fiel confidente, también goza de reconocimiento icónico para Jojo. Como si se tratase de un ídolo de masas fotografiado por la Rolling Stone al estilo de Meryl Streep o Axl Rose, la figura de Hitler decora la habitación con posters.

Tras Thor: Ragnarok, Waititi intenta humanizar de la manera más infantil al dictador alemán, logrando hasta seis nominaciones en los Oscar (película, actriz secundaria guion adaptado, montaje, diseño de producción y vestuario).

No es la primera vez que la cultura popular intenta paliar el horror del nazismo, sin olvidar la tragedia que aconteció hace menos de un siglo. Dejando a un lado el debate sobre los límites del humor, es interesante remarcar algunas obras cinematográficas que banalizan la maldad como El gran dictador, Malditos bastardos, La vida es bella y un largo etcétera. 

La comedia, con tono amable y apta para todos los públicos, muestra un campamento donde a unos niños de no más de doce años se les enseña a practicar lanzamiento de granadas. También hay cabida para el apoyo de la mujer en el régimen: quedándose embarazadas y curando heridas. 

Cuando en el imaginario de Jojo impera una forma monstruosa de los judíos, descubre que su madre Robin (Scarlett Johansson) esconde a una refugiada judía, Elsa (Thomasin McKenzie) tras un tabique. La idea de Waititi es el argumento inicial de la novela El cielo enjaulado de Christine Leunens, aunque el desenlace del largometraje se aleje de la idea de la escritora.

El director neozelandés lleva a las grandes pantallas el fanatismo desenfrenado de los seguidores de Hitler. Bajo los ritmos de la versión alemana de I want to hold your hand se alternan imágenes de archivo de muchedumbre nazi y Jojo gritando hail hitler mientras realiza el saludo romano a los habitantes de Falkenheim. 

Con la margarita de los Oscar 2020 casi deshojada, la cuenta atrás llegará a su fin el próximo 10 de febrero. La cinta de Waititi opta a coronarse con seis estatuillas compitiendo con otras como El Joker, El Irlandés, 1917 o Érase una vez en… Hollywood en la categoría de mejor película. 

Es necesario, además, apuntar la doble nominación de Johansson en los premios de la Academia. La intérprete de Viuda Negra en la franquicia del Universo Cinematográfico de Marvel está nominada en dos categorías; mejor actriz principal por Historia de un matrimonio y mejor actriz de reparto por Jojo Rabbit

 

Eva Ocaña

"La única verdad es la música" (Jack Kerouac)

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