Francis White no toma café. Desayuna Cola Cao caliente y un croissant, tal vez inspirado en esa Chocolate Girl que come galletas de chocolate y sabe divertirse. Habla con gracia, espontáneo y aniñado como las canciones de su álbum tocayo.
Cultura Joven: He leído que se puso Francis por el líder de Pixies, pero su verdadero nombre es imposible de encontrar.
Francis White: Mi nombre de verdad es Francisco, pero el apellido es artístico. El de verdad no te lo puedo decir, es secreto. Lo de Pixies que has leído es una de las cosas que me invento a veces. Y lo de White… es porque suena bien.
CJ: Inventa muchas cosas, ¿no? Como su procedencia: Kansas, Madrid, Islas Vírgenes…
FW: Eso no fui yo, fue un blog que decidió decir que yo era de Kansas, todo el mundo lo leyó, y a la gente le moló más que fuera de Kansas que de Madrid. Aunque creo que también puse algo por ahí de que venía de Kansas.
Quienes conocen por primera vez la música de Francis, suelen pensar que se trata de algún cantante americano. Él, simplemente, disfruta componiendo en inglés.
CJ: Cantar en inglés, ¿tiene más ventajas que inconvenientes?
FW: No lo veo con ventajas o inconvenientes. Probablemente tiene inconvenientes en España. Hay gente a la que le parece absurdo cantar en inglés aquí. Yo no lo veo con el sentido de para qué me va a servir, es simplemente porque me gusta. Puede que sea superficial, pero se reduce a querer hacer algo de forma determinada. Igual que unos hacen música clásica o instrumental, yo canto en inglés porque me apetece. Me gusta lo que me aporta.
The Beatles, Arctic Monkeys, The Velvet Underground, Richard Hawley, Josh Rouse y White Stripes influencian a este recién licenciado en Bellas Artes en su estilo, sonido e incluso idioma. Lo refleja en temas de corte lento y romántico como Crying y Endless Love; en la balada acústica On My Way; en el ukelele escondido tras los susurros de It’s Not Easy; en los pajarillos mañaneros que abren Like A Stranger; en la guitarra distorsionada, a modo de riff, de Sometimes; en la potencia y el rock de Pleased To Meet You; en la lucha estremecedora entre acordes mayores y menores de With You.
CJ: ¿Cómo han afectado Arctic Monkeys o los Beatles en el idioma y estilo de su música?
FW: Es una cuestión cultural y de cómo te has educado musicalmente. La mayoría de gente de mi edad ha crecido escuchando música en inglés. Eso, quieras o no, te predispone a hacerlo de esa forma. Obviamente el estilo que te gusta lo comes y lo echas a tu manera. Influencia tanto en el estilo como en la manera de hacerlo.
In Rainbows de Radiohead es mi disco inspirador.
CJ: Elija las tres canciones que más le han marcado de estas bandas.
FW: Qué difícil… en su día empecé a tocar la guitarra por Parachutes de Coldplay. Me lo enseñó mi hermana y me pareció increíble, aunque no te puedo decir una canción concreta. Hay otros discos como In Rainbows de Radiohead, que me parece increíble. Me quedaría con In Rainbows como disco inspirador.
CJ: Hay quien le compara con Thom Yorke…
FW: ¿En serio? Qué honor…
CJ: Sí, lo he visto. Tiene su sentido, yo también lo he pensado.
FW: Para mí Tom Yorke está muy arriba. Sí que tengo algo de él, si alguien lo ha visto. Es una influencia al cien por cien.
Su álbum Francis White se compone de doce temas que mezclan un rock alternativo muy suave con un folk alegre. Entre temáticas variadas, románticas muchas de ellas, y una voz tierna, Francis no se deja encasillar en un único estilo.
CJ: Las revistas definen su estilo de mil maneras. ¿Cuál busca usted?
FW: No busco ni un estilo ni estar en un sitio concreto. Obviamente el disco tira por unos sitios. Hay canciones muy folk y otras más rockeras. Pero no me gustaría decir: “quiero ser un cantautor pop”. En el segundo disco, que estoy trabajando en él, me voy a otro mundo distinto. Sería estúpido quedarme en un solo sitio. Quiero hacer música que defina lo que pienso y lo que siento en cada momento.
No busco ni un estilo ni estar en un sitio concreto.
CJ: Muchos críticos afirman que desde los Beatles no se inventó nada nuevo. Teniendo en cuenta la cantidad de música que existe, ¿se puede hacer algo nuevo?
FW: No lo sé. Puede ser, pero creo que la vuelta de tuerca tendría que ir más allá de “inventar un estilo nuevo”.
CJ: No hablo tanto de un nuevo estilo musical como de frescura. Cuando se le escucha, por ejemplo, no resulta aburrido, resulta diferente.
FW: Yo creo que tiene que haber una personalidad en la búsqueda de los colores del disco, y eso es algo que yo he hecho. Cuenta lo mismo que las letras y las melodías. Es el sonido, algo tuyo. Para mí no tiene sentido utilizar un plug-in de piano que da el sonido típico… creo que hay que buscar y colorear a tu manera.
La carrera en solitario del cantante despega tras quedar semifinalista en el concurso de maquetas de Radio 3, Proyecto Demo 2012 y finalista en la convocatoria del Sello 43 Music.
CJ: Compone en su habitación, por su cuenta. ¿Es factible para otros empezar así?
FW: Hoy en día es bastante factible, a un click cuelgas tu música.
CJ: Pero en Internet existe una sobreabundancia de información. ¿Cómo distinguirse, entonces?
FW: Siendo original, o tal vez bueno, es la palabra. Teniendo algo personal y que cuente algo, que comunique. Lo bueno de Internet es que todo el mundo puede colgar su música y lo malo de Internet es que todo el mundo puede colgar su música. Encontrar algo bueno me cuesta meses. Abunda lo mediocre por esa sobreinformación constante. Para destacar hay que contar algo interesante, tal vez no nuevo, pero sí que comunique a la gente. Puede ser musicalmente o con la extravagancia de tus vestidos. Yo me decanto más por la música que por mis vestidos.
Para destacar hay que contar algo interesante, que comunique.
CJ: ¿Cuál fue el detonante que le motivó a pasar de componer a enseñar sus composiciones?
FW: Francis White no es mi primer proyecto. Tuve otros, y tenía la inquietud de sacar mis composiciones. Con Francis White tenía unas canciones. Conocí al productor Suso Sainz, una figura clave para mí. Escuchó unas maquetas mías. Me dijo: “joder, esto mola, tienes posibilidades de sacar un buen disco y quiero producirlo”. Yo creo que enseñar tu música es algo natural. Hay quien prefiere guardárselo, pero yo lo veo como algo insano, porque no deja de ser comunicarse. La música es una forma de comunicación, si no hay alguien que reciba el mensaje, es absurdo, el círculo no se completa.
CJ: ¿Cómo va evolucionando el segundo disco?
FW: Voy muy lento. Hace bastante que saqué mi primer álbum y no puedo aproximar fechas. Voy muy a mi ritmo y creo que los tiempos tienen que respetarse. Quiero encontrar un concepto nuevo sobre el que escribir, trabajar en sonidos… en este tiempo he encontrado un camino para empezar a trazar cosas, pero es pronto para cerrar nada. Todavía me queda trabajo.
CJ: ¿Tiene algún proyecto fuera de España?
FW: Me gustaría. Podría coger el coche y pirarme. Pero siempre está el dinero, contar con una banda… aún así, me lo planteo. No sé cuándo, pero me gustaría.
Por ahora, sus planes de futuro próximo se dan en España. El próximo 30 de noviembre estará en la Puerta de Alcalá de Madrid ofreciendo un concierto solidario al aire libre, en colaboración con la sexta Carrera Ponle Freno, dedicada a las víctimas de los accidentes de tráfico.
Francis aún está terminando su desayuno mientras se deja tomar algunas fotografías. El chocolate se le debe de haber enfriado y, entre pregunta y pregunta, casi no le ha dado tiempo a probar su croissant, pero se muestra risueño, amable, dispuesto a seguir conversando.
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